El conductor de la pipa de gas LP que explotó el pasado 10 de septiembre en el Puente de La Concordia, ubicado en la alcaldía Iztapalapa de la Ciudad de México, falleció el martes 16 de septiembre, informó la Secretaría de Salud capitalina y confirmaron diversas fuentes oficiales. Fernando Soto Munguía, de 34 años, permanecía internado en el Hospital de Traumatología Víctoriano de la Fuente Narváez desde el momento de la emergencia y su deceso elevó a 19 el número total de personas muertas a causa de esta explosión, según reportes oficiales.
El siniestro ocurrió cuando la pipa que transportaba aproximadamente 50 mil litros de gas LP explotó en dicho punto vial, dejando además un saldo de 94 personas lesionadas, según cifras proporcionadas por las autoridades. El impacto del estallido generó daños materiales significativos y evacuaciones en la zona. Fernando Soto fue el único sobreviviente inicial de la unidad, recibiendo atención médica mientras las autoridades investigaban las causas del accidente.
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) informó que continúa la investigación para establecer las responsabilidades legales vinculadas con la explosión. Hasta el momento, Soto no fue detenido ni se le imputó formalmente ningún cargo; sin embargo, se informó que se indagan posibles delitos como homicidio culposo y daño a la propiedad. Las indagatorias buscan esclarecer las causas técnicas y administrativas que derivaron en el incidente.
Las autoridades no han precisado aún si hubo fallas en el equipo, errores humanos o condiciones externas que provocaron la explosión, por lo cual persiste la incertidumbre respecto a las circunstancias específicas que la ocasionaron. También continúan las labores en la restauración de la infraestructura afectada y la atención médica a los lesionados.
Este hecho tuvo repercusiones principalmente en la Ciudad de México y no se han reportado impactos directos ni vinculaciones específicas con el estado de Morelos. No obstante, la magnitud del accidente ha generado alertas en las autoridades de otros estados sobre la seguridad en el transporte y manejo de gas LP, considerando que implica riesgos para la población y el medio ambiente.
La Secretaría de Salud, junto con la FGJCDMX, mantienen un monitoreo constante sobre el avance de los afectados y la evolución de la investigación. Se esperan nuevas actualizaciones oficiales en los próximos días que permitan esclarecer los pormenores y determinar las responsabilidades legales correspondientes.
